Esencia de la tarea
Distribuir las perícopas según las exigencias de la serie a predicar (respetando, en la medida de lo posible, la distribución del mismo texto bíblico).
Descripción detallada
Aunque es verdad que esta tarea se podría realizar en cualquier momento previo al inicio de la serie – ¡incluso antes de estudiar nada! – el momento idóneo para ello es una vez que hayas conseguido un entendimiento general adecuado del libro bíblico en cuestión.
Partiendo de tal base podrás distribuir las perícopas del libro con mayor acierto y con un mejor conocimiento de lo que realmente implica desarrollar una serie de predicaciones sobre este contenido concreto. El hecho es que algunos libros bíblicos son más densos. Otros son algo repetitivos. Algunos, incluso, tan largos que posiblemente decidas predicar secciones representativas para así poder transmitir el mensaje del libro de una manera comprensiva y acertada, sin aspirar a predicar todo. Sobre todo en una situación como esta última, una cierta familiaridad con el libro es esencial para realizar una distribución que no menoscabe el mensaje del libro.
Para hacer
Con un ojo puesto en lo que has estudiado hasta el momento, distribuye las secciones a predicar y asígnalas a fechas concretas en el calendario. El resultado final mínimo debería ser un pasaje para cada domingo. Un resultado final algo más elaborado, incluiría una primera idea del tema que aborda cada perícopa o una noción del título que podría llevar el sermón.
Resultado mínimo
- Fecha
- Perícopa
Resultado algo más extenso
- Fecha
- Perícopa
- Una sugerencia de título
- Primer acercamiento a una idea principal
La tarea de distribuir perícopas es tan diáfana, en sí, que no requiere mucho más comentario que ¡manos a la obra! Sin embargo, como hay maneras de afianzar esta tarea, posiblemente venga especialmente a cuento ver los ejemplos que he puesto en el tutorial correspondiente.
Además, no te olvides de fechas señaladas (como Navidad, Domingo de resurreccion, etc.) que quizás deben interrumpir la serie. Estas pequeñas pausas hasta pueden venir bien (tanto para ti como para tus oyentes) como cambio de ritmo, si la serie resulta ser larga.
A tener en cuenta
Al distribuir las porciones a predicar, ten presente los siguientes consejos.
Ante todo, procura respetar las perícopas. Estas son las unidades lógicas más pequeñas que presenta un texto bíblico. Posiblemente, una de las maneras más sencillas de respetar el mensaje bíblico original es predicando estas unidades lógicas.
Piensa en tu manera de predicar. Sobre todo si las perícopas resultan muy cortas (pocos versículos) o muy largas (muchos versículos) ¿Estás preparado para ajustar tu forma de preparar y predicar para manejar estas variantes? No puedes, por ejemplo, plantearte una perícopa larga un domingo concreto y luego realizar un desarrollo desproporcionado, exponiendo los primeros versículos en gran detalle, sólo para ir de prisa y corriendo sobre los que conforman el resto de la porción.
Si piensas que en tu congregación lo más apropiado para las necesidades espirituales del momento son predicaciones que cubren porciones más extensas, para que, por ejemplo, los creyentes tengan conocimiento de mayor extensión bíblico, podrías pensar en sermones donde varias perícopas acaban siendo puntos dentro de un mismo sermón. Es cuestión de saber lo que estás haciendo, y ser coherente con esa forma de encarar la tarea.
Debe estar conectado para enviar un comentario.